Por: Zenon Mamani (*)
Escribo como un ciudadano
más de este país. Muchas veces no queremos arriesgar nuestros ahorros en
inversiones productivas, comerciales u otros, porque simplemente no tenemos
tiempo para dedicarnos a esas actividades, y los guardamos en algún banco o
mutual o, en todo caso, los colocamos bajo nuestros colchones.
Hay muchas formas de
ahorrar e invertir nuestro dinero para no tener que depositarlo en los bancos.
Una de ellas está en la compra de bonos ¿De qué tipo? Mediante el Banco
Unión, hace más de tres meses, el Gobierno Nacional colocó a la venta “Bonos
Tesoro Directo”, equivalente cada bono a mil bolivianos, ofreciendo una tasa de
interés más alta de la que ofrecen los bancos privados.
¿Ahorrar en los bancos? Las
instituciones bancarias han ganado en los últimos años millones de dólares con
el dinero que el ciudadano ahorra, porque los depósitos y los ahorros se
incrementaron tres veces, hasta llegar a más de 11.000 millones de dólares
(Ministerio de Economía y Finanzas Públicas). Esto significa que las familias
están ahorrando cada vez más y tienen confianza en los bancos; aunque, estos
últimos paguen una tasa de interés baja, en otras palabras, una migaja.
¿Dónde será mejor ahorrar?
Suponiendo que tenemos 1.000 manzanas, los bancos nos pagarían una tasa de interés
promedio anual de 1 por ciento, es decir, 10 manzanas (una miseria). Si
compramos los bonos del Tesoro, nos pagarían 3,5% anual (35 manzanas); por
tanto, este último parece más atractivo.
¿Es seguro comprar bonos?
Lo primero que un inversionista evalúa son los ingresos y la solvencia
financiera de quién va a comprar, en este caso, deberíamos evaluar las cuentas
del Tesoro General de la Nación (TGN).
Según datos oficiales del
Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, la recaudación tributaria, sin considerar
los ingresos por hidrocarburos, se ha incrementado más del doble desde la
gestión 2005: de Bs 13.546 millones a Bs 32.392 millones (2011).
Por sexto año consecutivo
existe superávit fiscal, la deuda interna del TGN respecto al Producto Interno
Bruto se redujo de 31 por ciento (2005) a 20 por ciento (2011), la deuda
externa de 52 a 15 por ciento en el mismo periodo.
Con estos indicadores, las
finanzas del TGN cumplen con los requisitos de un inversionista y la solvencia
financiera. Por tanto, es más seguro invertir comprando bonos del Tesoro,
porque te pagarían por los intereses más de tres veces de lo que te pagan en
los bancos.
(*) Es economista
Publicado en Los Tiempos el 19/09/2012
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